El primer ministro de Haití, Jean Max Bellerive, dijo ayer en Santo Domingo que su país, devastado por el terremoto del pasado 12 de enero, necesitará unos diez mil millones de dólares en cinco años para levantarse de las ruinas y que debe iniciar su refundación sin demora, incluso antes de que la comunidad internacional acuerde un plan para reconstruirlo.
Esta refundación “sin demora” pasa por dar prioridad absoluta a ese millón y medio de haitianos que se quedaron sin hogar y que se refugia en tiendas de campaña, que se las llevará el viento y la lluvia en cuanto empiece la temporada de huracanes, en junio.
Por tanto, el objetivo inmediato es empezar el levantamiento masivo de casas prefabricadas, aunque para ello se tenga que atrasar la Cumbre Mundial sobre Haití, prevista en principio para el 14 de abril en República Dominicana y trasladada para el 2 de junio. Así lo acordaron y lo anunciaron ayer desde Santo Domingo el primer ministro haitiano y el presidente dominicano Leonel Fernández.
La iniciativa de celebrar el encuentro surgió durante la misma semana en que se presentó el terremoto, en el marco de una visita que una comisión dominicana encabezada por el vicepresidente del país, Rafael Alburquerque, realizó a Puerto Príncipe en compañía del secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias
Además de la construcción de viviendas, los dos dirigentes explicaron que la postergación se debe a la proximidad de dicha cumbre, con la cita convocada por la ONU el 31 de marzo en Nueva York, también para tratar la situación de Haití.
Flores y rezos. Mientras tanto, miles de haitianos compraban flores y participaban ayer en actividades religiosas en el último día especial de oración en el marco del mes de luto que se vive en el país por las víctimas del sismo del pasado 12 de enero.
“Haití va a cambiar, nos levantaremos de estas ruinas”, coreaban decenas de jóvenes frente al palacio presidencial destruido y animaban a sus compatriotas a dejar pronto el luto, secarse las lágrimas y ponerse a trabajar por un nuevo futuro.
-
No hay comentarios:
Publicar un comentario