DIARIO - INTERNACIONAL - 06/02/2010> Puerto Príncipe Ap y Efe> La cifra de víctimas mortales en Haití tras el terremoto del pasado 12 de enero asciende ya a 212.000, según los últimos datos del Gobierno haitiano divulgados por el primer ministro, Jean Max Bellerive. En tanto, la situación en la capital se va complicando debido a que más de un millón de haitianos que huyeron al campo tras el terremoto comienzan a regresar a la capital, saturando las calles y estorbando en las tareas de reconstrucción.
"La última cifra que he recibido de mis colaboradores es de 212.000" muertos, aseguró Bellerive en declaraciones efectuadas ayer a la cadena estadounidense CNN desde Puerto Príncipe. Este número aún podría "aumentar algo", añadió al referirse al cómputo final de fallecidos en la tragedia, una de las mayores en cuanto al número de víctimas registradas en el continente americano.
Además, más de 300.000 personas resultaron heridas y más de un millón quedaron sin hogar, pero, según el Primer Ministro, si a esta cifra, se agrega a quienes no tenían hogar antes del sismo, se tiene a más dos millones de personas en las calles.
Asimismo, el millón de haitianos que huyó al campo tras el terremoto empieza a volver a las ciudades-campamento de Puerto Príncipe, complicando la reconstrucción.
Asimismo, el millón de haitianos que huyó al campo tras el terremoto empieza a volver a las ciudades-campamento de Puerto Príncipe, complicando la reconstrucción.
El presidente René Preval ha insistido que el Haití del futuro debe ser descentralizado. En la actualidad, un tercio de los 9 millones de haitianos viven en la capital, que además fue la ciudad más castigada por el terremoto. Preval anunció la "Operación Demolición" en un esfuerzo por retirar todos los escombros de edificios públicos y privados que se derrumbaron en el sismo.
Los ocupantes serán retirados a la fuerza de ser necesario, dijo Aby Brun, un arquitecto integrante del equipo de reconstrucción. "Destruiremos en forma metódica y segura", dijo Brun.
El ex presidente Bill Clinton, que se encontraba en Haití ayer como enviado especial de Naciones Unidas para el socorro de Haití, ha insistido desde un principio que la reconstrucción "no se medirá en días y semanas, sino que se medirá en meses e incluso años".
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